La gestión implica recolección de residuos de la ciudad, planificación de la ubicación de los contenedores en vía pública, recuperación de espacios públicos (limpieza de basurales), limpieza de playas y ramblas, levante de residuos especiales (voluminosos, podas y escombros) y barrido de avenidas, bulevares y limpieza de ferias, entre otros.